Jesús nos llama a la unidad en este tiempo de división
“Nadie tiene un amor mayor que éste: que uno dé su vida por sus amigos”.
El Señor Jesús nos ofrece esta desafiante enseñanza en el Evangelio de Juan que nos llama a muchas cualidades que procuramos como personas de fe: sacrificio, lealtad, fidelidad…y yo agregaría, unidad.
Puede parecer, cuando analizamos los acontecimientos que ocurren en nuestro mundo, nuestro país e incluso en algunas de nuestras comunidades, que esa unidad es cada día más difícil de alcanzar. Vemos más conflicto, más división en la sociedad. Las diferencias de raza, género, religión, opinión política y otras distinciones se convierten en barreras para la unidad. Todas ellas influyen en la campaña para elegir a nuestro próximo presidente que, si bien está sólo en la etapa de elección primaria, ha alcanzado ya un nivel de descortesía y hostilidad sin precedentes.
Como personas de fe, ¿qué debemos hacer?