Diocesana

SAN BERNARDINO—El Obispo Auxiliar Rutilio del Riego se ha jubilado del cargo episcopal después que el Papa Francisco aceptara la carta obligatoria de renuncia que el Obispo del Riego envió al Vaticano en septiembre. 

 El Obispo del Riego hizo el anuncio sorpresa antes del inicio de la Misa de las 8:00 a.m., en el Centro Pastoral Diocesano en celebración de la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe. El Obispo del Riego leyó simplemente la carta del Nuncio Apostólico Carlo María Viganó informándole que se había aceptado su renuncia. Minutos después, cuando el Obispo del Riego leyó la Colecta, u, oración de apertura de la Misa, la emoción le ahogó la voz. 

 Posteriormente, en la celebración de Nuestra Señora de Guadalupe durante el almuerzo en el Centro Pastoral, el Obispo del Riego explicó que Viganó le había dado la oportunidad de elegir el día en que se hiciera pública su renuncia. 

Por Mario Martínez 

 Nuestra diócesis se llena de gozo junto a todo el país, por el octavo Encuentro Mundial de las Familias que ya se aproxima. En preparación para este gran evento, las familias en nuestra diócesis tuvieron la oportunidad de participar en un proyecto de evangelización y catequesis muy importante. Se motivó a las familias a compartir un video corto, de cómo viven los cuatro valores Diocesanos de hospitalidad, reconciliación, colaboración y el compartir la fe en su iglesia doméstica.

Por Andrés Rivera

 

Petra Alexander, directora de la Oficina de Asuntos Hispanos, fue reconocida por la Asociación de la Prensa Católica de los Estados Unidos y Canadá en los Premios de libros CPA por un libro que fue coautora y que es sobre el ministerio de justicia restaurativa.

 El libro, Un Corazón Encarcelado, recibió una mención honorífica en la categoría de Ministerio Pastoral. El libro también fue incluido entre los 20 finalistas de los Premios Internacionales Latino Book en la categoría de libro de inspiración.

 Muchas personas que tienen a alguien encarcelado o detenido también son encarceladas por sus propias emociones. Necesitan asistencia para enfrentar la situación, pero no saben a dónde ir.

 “Veo esto como una ventana o un espejo para que uno puede verse a sí mismos en las historias que se comparten”, dijo Alexander. “Para mí, es importante compartir estas historias.”

 Alexander se inspiró para trabajar en este libro porque se encontró con muchas personas que iban a otras iglesias para encontrar ayuda y recursos.

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