Por Eddie Perez
Así que nos reunimos como Iglesia para nuestras sesiones de catequesis aproximadamente una vez a la semana. Vivimos un retiro, tenemos algunos proyectos de servicio, y si somos afortunados quizás reunimos a las familias fuera del salón de clase una vez al mes como comunidad. ¿Te suena familiar? Tal vez esta sea una receta típica para nuestros esfuerzos de catequesis en la parroquia. Sin duda estos pueden ser grandes elementos para incorporar. Pero, ¿qué falta?
Por varios años hemos soñado con llevar nuestros esfuerzos de catequesis al siguiente nivel. Queremos evangelizar, construir el reino de Dios y no sólo difundir información. ¡Queremos que aquellos a quienes acompañamos, tengan un encuentro con Cristo! Queremos que conozcan a Dios. Después de todo, cuanto más conozcan a Dios, más amarán a Dios. Cuanto más amen a Dios, más querrán servirle. Entonces, ¿cómo lo hacemos? ¿Estamos facilitando un encuentro con Cristo en todo lo que hacemos?
Stephen Covey, el autor de Los Siete Hábitos de Personas Altamente Efectiva, acuñó la frase “Lo principal es mantener lo principal como lo principal”. Necesitamos mantener a Cristo en el centro de (en el directorio) todo lo que hacemos. No se trata predominantemente de la herramienta o la estrategia. Estas cosas son secundarias. Se trata de centrarnos en Cristo en todos nuestros esfuerzos como catequistas.
Reflexionemos sobre cómo compartimos la presencia de Cristo: cuando contestamos el teléfono, respondemos a un correo electrónico, compartimos información, trabajamos en equipo, pedimos ayuda, trabajamos en un proyecto, etc. Ya sea que enseñemos en un salón de clase o ofrezcamos una sesión de catequesis en línea, dejemos que Cristo sea el centro. Así, las herramientas de catequesis a nuestra disposición pueden ser mejor utilizadas.
Como catequistas, estamos representando a Cristo y a Su Iglesia. Todo lo que hacemos, debe de dirigir a los demás hacia Cristo. Como resultado, estamos evangelizando, sirviendo como testigo de la presencia de Dios en medio de nosotros, y proporcionando la base para el discipulado intencional.
Así que la próxima vez que planifiquemos un taller, ofrezcamos formación o creemos un evento, asegurémonos de que estamos facilitando un encuentro con Cristo. Esto es de mayor importancia y nos permitirá mantener lo principal como lo principal.
Eddie Perez es un Coordinador de Vicariato en la Oficina de Catequesis.