Por María Antonia Amao
El Sagrado Corazón de Jesús es la expresión de su amor divino por la humanidad. Esta devoción ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, al meditar sobre el corazón abierto de Jesús por el cual manó sangre y agua. (Jn 19, 33) Muchos santos se han inspirado en este signo de amor extremo, como San Agustín, San Buenaventura, Sta. Catalina de Siena, San Juan Eudes. Fue Santa Margarita María Alacoque la que dio popularidad a esta devoción en un tiempo que en Francia se extendía el racionalismo. Esta devoción se hizo popular después de la muerte de Santa Margarita en 1690 y se estableció como fiesta en Francia en 1765. Años después se inició la construcción de la Basílica del Sagrado Corazón en París. Numerosas obras apostólicas han surgido en la Iglesia inspiradas en ese Corazón de Jesús, que sigue amando a la humanidad. En un viernes Cristo entregó su vida, y el viernes posterior al segundo domingo de Pentecostés lo celebramos en la Iglesia, este año es el 14 de junio.El Sagrado Corazón de Jesús es la expresión de su amor divino por la humanidad. Esta devoción ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, al meditar sobre el corazón abierto de Jesús por el cual manó sangre y agua. (Jn 19, 33) Muchos santos se han inspirado en este signo de amor extremo, como San Agustín, San Buenaventura, Sta. Catalina de Siena, San Juan Eudes. Fue Santa Margarita María Alacoque la que dio popularidad a esta devoción en un tiempo que en Francia se extendía el racionalismo. Esta devoción se hizo popular después de la muerte de Santa Margarita en 1690 y se estableció como fiesta en Francia en 1765. Años después se inició la construcción de la Basílica del Sagrado Corazón en París. Numerosas obras apostólicas han surgido en la Iglesia inspiradas en ese Corazón de Jesús, que sigue amando a la humanidad. En un viernes Cristo entregó su vida, y el viernes posterior al segundo domingo de Pentecostés lo celebramos en la Iglesia, este año es el 14 de junio.