Por Edgardo Juarez

 El Papa Francisco nos invita a llevar la alegría del evangelio a los más necesitados y los jóvenes están respondiendo a su llamado. Por segundo año consecutivo el Ministerio de Pastoral con adolescentes de la comunidad de Santa Kateri Tekakwitha en Banning sale al encuentro de los indigentes y más pobres de su comunidad. 

En un espíritu de hermandad los indigentes del área fueron invitados a las instalaciones parroquiales para convivir con ellos, conocer sus historias y proveerles con necesidades básicas como un corte de pelo, un baño y un almuerzo en la semana de acción de gracias. Por la mañana, se les ofreció la oportunidad de asearse y obtener un corte de pelo en colaboración con la organización Healing Waters.  Posteriormente los jóvenes prepararon el salón parroquial con un ambiente de fiesta y otros detalles de hospitalidad para dar una calurosa bienvenida a aquellas personas que frecuentemente son ignoradas y desatendidas por la sociedad. Los invitados de honor hicieron su entrada al salón donde fueron recibidos con ambiente acogedor y un rico almuerzo que fue especialmente cocinado para ellos. Los jóvenes tuvieron la oportunidad de servirles la comida y sentarse a compartir con ellos y conocer sus historias.

 La participante Lulu Anaya recuerda vivamente que “los rostros de los indigentes eran radiantes, llenos de asombro y con lágrimas en sus ojos y voz cortada agradecían las atenciones. Yo que estuve en la puerta tuve la dicha y el regalo de ese contacto directo. Al abrazarlos me encontré con Cristo mismo que me miraba con ternura y con amor me decía, tengo sed.”  Las jóvenes Tiara y Tamara Martinez, resaltan que esta experiencia les cambió la perspectiva de sus hermanos indigentes; “a veces uno juzga rápidamente sin conocer las historias de estas personas. Al compartir con ellos nos dimos cuenta de que son tan humanos como cualquiera de nosotros. Son amables, sonríen y tienen un corazón bueno.” Los jóvenes que participaron esperan que a través de esta acción misionera sus hermanos indigentes puedan reconocer que Dios nunca los olvida y siempre los acompaña.

 A estos esfuerzos se unen también otras comunidades de jóvenes en nuestra diócesis.  En el caso de la parroquia de San Bernardino, el consejo juvenil hace una campaña llamada “Angel Trees” o ángeles de esperanza con el objetivo de recaudar ropa, comida y artículos de primera necesidad para niños y jóvenes de un orfanatorio en Tijuana México. Con el apoyo de su comunidad y sus padres los jóvenes viajan a Tijuana en enero en la celebración de epifanía del Señor o Día de Los Reyes Magos para compartir lo recaudado con los niños y jóvenes del orfanatorio.

 De igual manera, con un espíritu de agradecimiento y servicio al prójimo el ministerio de jóvenes adolescentes de la comunidad Nuestra Señora de Guadalupe en Chino prepararon canastas de acción de gracias para compartirlas con las familias más necesitadas de su comunidad. Cada canasta tenía una cena completa de acción de gracias al igual que oraciones de acción de gracias y mensajes para cada familia.

 Nuestros jóvenes tienen presente que somos una comunidad de creyentes en Cristo Jesús comprometidos a llenar vidas con esperanza a través del impacto del Evangelio.  En esta navidad ellos nos invitan a reflexionar cómo podemos contribuir a construir un mundo más fraterno siguiendo los ideales de Jesús. Que la alegría del recién nacido llene nuestros corazones de Paz y Amor. ¡Feliz Navidad!


Edgardo Juarez es Director de la Oficina de Pastoral con Juventud Católica en la Diócesis de San Bernardino.