El diálogo entre el pueblo de Dios que el Papa Francisco ha dicho es fundamental para el Sínodo sobre la sinodalidad ha comenzado en las comunidades de fe de la Diócesis de San Bernardino.
Varias parroquias organizaron la primera de sus sesiones de escucha en enero. Estas sesiones se consideran la principal herramienta para reunir opiniones de los fieles durante la fase de consulta del sínodo. En muchos casos, comenzaron con una sesión de escucha más pequeña compuesta por el personal parroquial o el consejo parroquial.
“El personal ha sido muy honesto,” dijo el Padre Timothy Do, párroco de San José en Upland, sobre las sesiones de escucha con su personal. “[El equipo sinodal de la parroquia] y yo escuchamos más de lo que respondimos.”
Después de las sesiones de escucha, la iglesia de San José preparó encuestas para los parroquianos que fueron publicadas en el boletín de la parroquia. El Padre Do dedicó 10 minutos de su homilía en las Misas del fin de semana explicando el proceso de la consulta del Sínodo. Se les invitó a los parroquianos a llevarse las encuestas a su casa para dialogar sobre su contenido y la semana siguiente se les dio algunos minutos durante la Misa para responder a ellas.
“Ha sido una bendición para la parroquia,” dijo él. “Es importante para mí como el párroco saber lo que está pasando.
“Ya hemos aprendido mucho.”
En la parroquia del Sagrado Corazón en Rancho Cucamonga, a miembros del equipo sinodal se les encomendó la tarea de “salir” y dialogar con miembros del público que no tienen mucho contacto con la parroquia. El equipo sinodal en la parroquia de San Pedro y San Pablo en Alta Loma ha programado sesiones de escucha con los padres de niños y jóvenes que son parte de los programas de la Educación Religiosa.
Un precursor importante para todos los párrocos que programan sesiones de escucha en su parroquia fue una sesión de escucha entre los sacerdotes de la diócesis y el Obispo Alberto Rojas. La reunión tomó lugar por medio de la plataforma de Zoom el 18 de enero y participaron alrededor de 110 sacerdotes, incluyendo religiosos, externos y sacerdotes diocesanos. La sesión de tres horas y media incluyó compartimiento en grupos pequeños y en el grupo general. Algunas de las preguntas claves que se plantaron fueron:
- ¿Cómo lo ha acompañado la Diócesis en su ministerio como sacerdote? ¿Cómo lo ha abandonado?
- ¿Cuáles son las preocupaciones e inquietudes de sus parroquianos?
- ¿Qué lo ayudaría a preservar su entusiasmo como sacerdote?
“Fue bueno escuchar el compartimiento de otros sacerdotes, tanto lo bueno como lo malo,” dijo el Padre David Andel, JCL, quien co-facilitó la sesión de escucha. “Creo que las personas sintieron que fueron escuchadas. Queríamos ofrecer una buena reunión que ayudaría a los sacerdotes a comenzar las sesiones de escucha en sus propias parroquias.”
La Diócesis sigue proporcionando asistencia a los miembros de los equipos sinodales en las parroquias que tienen la tarea de facilitar las sesiones de escucha. Los entrenamientos tomaron lugar el 18 y el 19 de enero en los cuales participaron más de 500 personas, y la Diócesis publicó una guía para facilitadores de 20 páginas y también grabó videos instruccionales para cada uno de los cinco módulos de entrenamiento para la facilitación.
Todos los materiales, artículos y videos para el Sínodo pueden encontrarse en: sbdiocese.org/Synod/index.html.
Las Reuniones Anuales de Vicariatos Combinados, programadas para el 9 y el 16 de febrero, se enfocarán principalmente en el Sínodo. El Obispo Alberto Rojas hablará sobre el proceso Sinodal local, y la Hermana Nathalie Becquart, la conferencista principal, tratará el tema desde una perspectiva más global. Las sesiones de grupo en las Reuniones de Vicariatos Combinados tendrán tres mesas redondas representando diferentes grupos de la Diócesis, incluyendo ministros de jóvenes y jóvenes adultos, clero y líderes ministeriales laicos.
“Ellos compartirán respuestas e historias derivadas de las preguntas en los materiales de consulta del Sínodo,” dijo la Dra. Amanda Alexander, directora del Departamento del Instituto de Formación para los Ministerios, y un miembro del Equipo Sinodal Diocesano.
La fase de consulta del Sínodo está programada a continuar hasta la Cuaresma, después los comentarios y las respuestas recibidas serán revisadas y sintetizadas en un reporte y entregado al Vaticano en octubre.
El Padre Andel dice que el escuchar y reflexionar entre todos los participantes locales en el Sínodo son claves para el proceso de consulta.
“Creo que es importante que lo tomemos en serio y busquemos las huellas de Dios en esto,” dijo él.